sábado, 19 de septiembre de 2009

Los de derecha no quieren ser de derecha

por Sandra Russo (Página 12, "Una invitación")
Estoy hasta las extensiones que no tengo de las ñoñadas de la derecha, sobre todo porque fíjense: uno lucha todo el día con las palabras, para que sean correctas, directas, lo más precisas posible. Y en las últimas semanas hemos presenciado el espectáculo de la derecha diciendo cualquier cosa. La impunidad con la que hacen uso del lenguaje y formatean la realidad a su antojo es notable. Están acostumbrados a decidir todo, hasta el nombre de las cosas. Lo último de lo último, según pudo saberse en el cónclave de notables que visitó la Legislatura porteña, es que no quieren que se diga que son de derecha. Les molesta. Lo toman como una ofensa. ¿Cómo se explica? Son muy bien tratados por la gran prensa. No hay campañas multimediáticas de desprestigio de ningún pope de estos que ahora sitúan el mal en Venezuela. Se diría que es al revés. Ellos son los ideólogos del nuevo eje del mal en la región, ellos son los que pusieron la semillita intelectual. No es que defienda todo lo que pasa en Venezuela, ya que para eso tendría que saberlo. Nadie está informado sobre lo que pasa en Venezuela. (A Alvaro Vargas Llosa, por ejemplo, le hicieron notas cuando “lo detuvieron en el aeropuerto de Caracas y le retuvieron el pasaporte”. Ni una ni otra cosa. Fue un trámite migratorio largo.) La información que llega es tan sesgada y tendenciosa que desinforma. Pocos argentinos están en condiciones de discutir algo relacionado con Venezuela, porque lo que circula son clichés. En fin, pero ellos dicen que no son de derecha. Quieren ser el centro porque quieren además ser la voz oficial del mundo.

viernes, 11 de septiembre de 2009

DEMOLIENDO BALNEARIOS


Nos recibió en su despacho el Jefe de Gabinete Rodolfo Pappaterra, a quien consultamos sobre un tema que genera polémica, pasan los años y no hay una respuesta adecuada, nos referimos al tema playa y por ende las concesiones de los balnearios.
"Estamos trabajando en el tema en grandes rasgos puedo decir, tiramos todo lo que está en la playa, arrancamos de cero, se construye con materiales como maderas, sobre pilotes, el sustento es recuperar el médano, lo que se pueda recuperar, sino tendríamos que tirar abajo las dos primeras manzanas de Pinamar, eso no se va a poder hacer, tratemos de recuperar lo que podamos. Asignemos espacio, estamos trabajando con parámetros que se pueda prestar un buen servicio, que no se vean afectados por las sudestadas, recuperar muchísimos metros de playa para uso de la gente. La idea es empalmar esto con una suerte de pasarela, desde el muelle hasta la frontera, con accesibilidad para personas discapacitadas, también en los balnearios".
¿Este proyecto para cuando sería?
Hacemos futurología, el 30 de abril del 2010, vencen las concesiones, el 2 de mayo empiezan a demoler los balnearios.
¿Qué pasa con los balnearios (cuatro) que ya vencieron el plazo de concesión?
Pasa exactamente lo mismo que con los doce del año pasado, extender por ocho meses más hasta el 30 de abril de 2010, la ocupación del espacio público. Basta de dejar unos si otros no, o hacerlo gradualmente, Villa Gesell, demostró que se puede, entonces vamos hacerlo. La idea es que los 40 balnearios terminen la concesión todos juntos.
¿Quién se hara cargo de la demolición de los balnearios?
Del nuevo concesionario, porque de esa manera nos aseguramos que la playa quede limpia, si vos se lo encargas al que se va y no renovó, no le va a importar dejarla limpia (sin construcción).
¿Cuando se llamaría a licitación?
La idea es que sea antes de fin de año, para que el que gano sepa que el 2 de mayo de 2010 tendrá que demoler y construir el nuevo balneario antes de la temporada 2010/11. Todo esto si lo comparte el Concejo Deliberante, quien es el que decide sobre la playa.