miércoles, 25 de junio de 2014

Una omisión que tiene consecuencias

(Pinamarinfo) Según las distintas notas presentadas por los bloque de FpV-PN- Kolina, Unión Cívica Radical y Frente para la Victoria, le solicitaron al presidente del Concejo, Maximiliano Santini, la realización de sumarios administrativos debido a la “grave irregularidad” que implicó la ausencia del tratamiento de la “Rendición de Cuenta 2013” (Expediente n° 4123-0964/14). Mientras que, según lo expresado en los  distintos despachos, los concejales ignoraban que dicho expediente y la rendición habrían ingresado al Concejo el 28 de marzo de 2014, fecha límite de la presentación por parte del Departamento Ejecutivo. Al mismo tiempo los ediles deslindaron las responsabilidades política, civil, penal y administrativa que pudieran existir.





Los ediles tomaron conocimiento de que el expediente ya había sido remitido por el Departamento Ejecutivo al HCD el viernes 6 de junio en una reunión informal de boca del propio presidente Maximiliano Santini. Recordemos que el cuerpo Legislativo  votó por unanimidad, la resolución dictaminada por la Comisión de Presupuesto en la cual le reclamaban la Rendición de Cuanta 2013 al DE, ignorando la presencia del expediente en el Concejo que no constaba en el sistema informático. Lo llamativo es que ni los concejales oficialistas, ni los propios funcionarios del Gobierno sacaron a los concejales del error por la omisión en la que estaban incurriendo. Inclusive después de que los distintos bloques hubieran insistido, llamadas telefónicas de por medio.

Además de los despachos enviados por los presidentes de los bloques: Mercedes Taurizano, Juan Ocampo y Alberto Germain, con el respaldo de los ediles que los integran, el bloque de Kolina insistió con un pronto despacho enviado la semana pasada por el cual le reiteró al Presidente del HCD “todos los términos de la nota, y reclamó la aclaración de los motivos y las causas por las cuales el expediente en cuestión fuera retenido más de dos meses y medios sin el conocimiento de los concejales”.

La consecuencia del desliz administrativo trae aparejado que para el Tribunal de Cuentas la Rendición del año 2013 que refleja la consumación del presupuesto, quedó aprobada de hecho siendo que en este caso no fue tratada por la Comisión y mucho menos en sesión.

¿Un error involuntario? ¿Un descuido, producto de la inexperiencia? ¿Una irresponsabilidad que todavía no tiene respuesta? ¿Una viveza a sabiendas de las consecuencias con la debida operatoria periodística? Muchas preguntas, pocas respuestas.





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