domingo, 29 de septiembre de 2013

“¿Qué pasa? ¿No tienen los votos?”


SESION ORDINARIA
Las maniobras de los cinco ediles oficialistas, que dominan la mayoría automática del HCD, se vieron alborotadas por la ausencia de uno de ellos a último momento. Sorpresiva y rápidamente, fueron retirados del Orden del Día dos puntos sensibles a los intereses del oficialismo. Y los vecinos fueron testigos..

Por Mariana Dufour
La sesión que se celebró el jueves 26 en el Concejo Deliberante de Pinamar presentó el escenario ideal para que el gobierno y sus amigos mostraran sus acostumbradas trampas y manejos “non sanctos” en pos de lograr sus objetivos…esos que nunca tienen demasiado que ver con los intereses del pueblo.
Ante la ausencia de la “Concejal del Pueblo”, Gladys Barce, la mayoría automática del oficialismo, sencillamente, se quebró. Por lo tanto, un par de puntos del Orden del Día fueron retirados en silencio y sin el debido pre aviso a la totalidad del Cuerpo.



 “La falta de respeto del interino”
La sesión inició con un punto aprobado sobre tablas: luego del desplante sufrido por los ediles y vecinos que integran la Comisión Permanente de Seguridad por parte de el intendente interino Hernán Muriale, la concejal Mercedes Taurizano leyó la nota firmada por Muriale donde la acusa a ella y a Gabriel Vidauli de ser insultantes durante estas reuniones. “No le he faltado el respeto a nadie. Si no le gusta que le marque que su administración es altamente cuestionable, lo siento, pero lo seguiré haciendo”, manifestó Vidauli. Rosana Di Pascuale se sumó a los dichos manifestando su indignación por la falta de respeto del intendente interino. Luego, Taurizano presentó un decreto para la citación formal de éste, el Coordinador de la Guardia Urbana y la cúpula de la Policía.



Inmediatamente, el concejal Edgardo Paso se retiró descompuesto del recinto. Su ausencia en nada modificaría el resultado de las votaciones: la mayoría automática ya estaba perdida pero los puntos “delicados” para el oficialismo ya habían sido retirados del Orden del Día.



Los primeros items a tratar se refirieron al mismo tema: la inseguridad. El HCD solicitó al Ejecutivo un informe sobre las acciones del cuestionado Foro de Seguridad; también un pedido de informes sobre la ejecución presupuestaria de la tasa de Seguridad. Ambos fueron aprobados por unanimidad.



Otro de los puntos refería a la Guardia Urbana: el intendente interino solicitó al Concejo la autorización para suspender por 180 días el requisito de poseer titulo secundario para inscribir aspirantes a agentes. La solicitud fue rechazada por cinco votos a tres.



Los temas desaparecen debajo del sillón presidencial



Los puntos se sucedieron de manera ordenada hasta que, repentinamente se pasó del punto 7 al 9. Advertido el Presidente del HCD sobre esta falla, Alberto Germain sorprendió a todos (o a casi todos): informó al Cuerpo que el punto había sido levantado del Orden del Día. ¿Que trataba ese punto? Nada más ni nada menos que la aprobación de una licitación única para la adquisición de máquinas viales (Expediente M-919/13 C).



Las explicaciones sobre esta alteración en el Orden del Día fueron solicitadas por Rosana Di Pascuale. Las excusas, in entendibles, fueron responsabilidad de Martín Rapallino.



Llamativamente (¿llamativamente?), el punto 12 también fue retirado del Orden del Día sin previo aviso: este ítem pretendía la aprobación de la Ordenanza Preparatoria para tratar el tema de la Planta Depuradora. Una ordenanza que redundaría en un nuevo aumento encubierto de la tasa municipal, tal como ya sucedió en la sesión anterior con la aprobación de la iniciativa de Paso, Agua para Todos.



Ante la falta de respuesta del oficialismo, Vidauli ofreció una razón para entender este retiro: “¿Será porque no están los votos? Los cinco votos que permiten la aprobación de ordenanzas como estas…Si se desaprobaba hoy, no se podía volver a tratar”.



Más sorpresas…



El punto 13 también depararía sus sorpresas: pretendía la aprobación de la baja de vehículos municipales, un tema que debe ser estudiado con cuidado porque, como ya habría ocurrido en otras ocasiones, se dan de baja vehículos que solo requieren una pequeña reparación. Meses después, la comunidad puede ver a algún funcionario paseando por la ciudad en ese mismo vehiculo. Y así parecía que iba a suceder: al volver del cuarto intermedio solicitado para estudiar el expediente, Rapallino mocionó que el punto pasara a comisión porque “uno de los vehículos no debe ser dado de baja ya que puede ser reparado”. Su moción fue aprobada.



El Punto 14 fue presentado por el Bloque de la UCR y requería un informe sobre licitaciones de materiales eléctricos realizados a principios de año. El pedido se fundamenta, según explicó Fernando Ávila, en que había recibido “una denuncia de que se estaban robando los materiales. Por eso, queremos saber que es lo que se compro en febrero”. El punto fue aprobado por unanimidad.



Entrar por el lado sensible



La jornada legislativa continuó con la aprobación de dos licitaciones únicas más: una, referida a la adquisición de material descartable que carecía de toda la información administrativa necesaria. Se trataba de un tema que, como se sabe, mueve sumas siderales. Aun así, el punto fue aprobado por siete votos positivos y la negativa de Vidauli. Éste justificó su negativa: “No están pidiendo un acto de fe y yo ya les perdí la fe hace rato”.



El otro punto trataba un despacho firmado por los concejales del MUPP y Germain y refería a la adquisición de medicamentos que también carecía de la información esencial y del procedimiento administrativo correspondiente: por ejemplo, no informaba sobre el monto de la licitación o sobre las empresas intervinientes. Aun así, el tema que juega con “lo más sensible”, fue aprobada por tres votos positivos (Germain, Rapallino y Elizalde), tres abstenciones (de Porretti, Di Pascuale, Taurizano y Ávila) y la negativa de Vidauli.

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