Los sindicalistas rechazaron la presencia de la prensa

(Pinamarinfo) La cúpula del Sindicato de Trabajadores Municipales se retiró de la reunión que iban a entablar con los concejales por la presencia de la prensa. La iniciativa del encuentro vino de parte de la comisión directiva. El tema se refiere a la aprobación del presupuesto y el aumento salarial de los municipales. La invitación a los periodistas fue hecha por el propio Concejo Deliberante que aborda una política de transparencia en el tratamiento de los temas.

Desde la semana pasada se programó a pedido del Sindicato de Trabajadores Municipales de Pinamar una reunión en el Concejo Deliberante con todos los ediles. La prensa fue invitada debidamente y por correo desde el área de prensa del HCD para este martes 14 de febrero a las 11 horas. Además la misiva especificaba los temas a tratar: salarios y presupuesto.
Seis de los diez ediles que conforman el cuerpo estaban presentes: Edgardo Paso, Fernando Ávila, Roberto Porreti, Gabriel Vidauli, Hernán Muriale y el presidente, Alberto Germain. Alfredo Baldini llegó mas tarde, cuando los integrantes del sindicato se estaban retirando del recinto.
Los concejales presentes ya se habían ubicado en torno a la mesa de reuniones mientras que la prensa junto con los secretarios de bloque en el margen izquierdo ocupando parte del recinto ya que del sector contrario se encuentra la ventana. Justo antes de comenzar llegó la concejal Rosana Di Pascuale que preguntó en voz alta “si la prensa iba estar presente en la reunión” ante la respuesta afirmativa de sus pares dijo que no participaría y se retiró . En ese momento los directivos del sindicato, Mónica Lugones, Carlos De León, Nora Fabiáni y Miguel Bonomi se quejaron también por la presencia de los periodistas. Hasta ese momento los comunicadores presentes eran: Juan de Marchi, Mariana Dufour de Semanrio Pionero y quien suscribe. Luego se agregaron: Sergio Michnowicz, Guillermo Jozami, la gente de Telpin TV y la televisión.
Ante la disyuntiva el presidente preguntó a los ediles si alguno tenía inconveniente en la incorporación de los periodistas y nadie mostró oposición. Situación que enardeció más a la cúpula sindical que amenazaron con retirase, cosa que efectivamente hicieron minutos después. Destacamos la actitud de la cúpula porque el delegado de Tránsito, Sergio Marquez, no encontraba explicación a la medida y se sintió desalado por la reaccion de sus compañeros, en varias oportunidades destacó que si le tenia que decir a sus compañeros que una reunión tan importante se suspendía por la presencia de la prensa lo iban a matar. El trabajador tampoco encontró razón en la actitud de Di Pascuale.
Hernán Muriale trató inútilmente de disuadir a los gremialistas que acusaban a los periodistas de tergiversar la realidad. Otra de las excusas planteadas era que estuvieran presentes todos los concejales de manera que se solidarizaban con Di Pascuale. El argumento carecía de sustento ya que Mercedes Taurizano, Daniel Lamas y Baldini tampoco estaban en la reunión.

Evidentemente las crónicas periodísticas molestan y mucho a una dirección sindical que viene en baja tanto en credibilidad como en transparencia. No es secreto que los afiliados están molestos por los acuerdos realizados por la actual conducción en el orden salarial con el Departamento Ejecutivo, así como los acuerdos que realizaron para propio beneficio. Es el caso de Alberto Buonomi que renunció a su cargo sindical para aceptar una dirección creada para él. Los afiliados tampoco entienden algunas sumas salariales, disfrazadas de horas extras, sin contar la cantidad de familiares y acomodados que ingresaron al Municipio. Otras de las quejas de los trabajadores municipales hacia la comisión directiva es el uso que se hace de sus servicios a la hora de los reclamos. Hace apenas un mes la dirigencia sindical incitaba sin éxito una movilización hacia el Concejo Deliberante. El objetivo de la manifestación era presionar a los concejales para que aprueben un presupuesto que eleva los impuestos en más de un 60 %. Tampoco es una falacia de la prensa el pedido de renuncia, en asamblea extraordinaria, por parte de los asociados a Mónica Lugones a su cargo en el área de Recurso Humanos. Lugones continúo en el puesto haciendo oídos sordos a la solicitud de los trabajadores. Ni es una falsedad los graves disturbios del año pasado en otra asamblea extraordinaria, situación que se le fue de las manos a comisión directiva, cuando recurrió a la presencia de dirigentes de la Federación de Sindicato de Trabajadores Municipales. Los gordos patotearon y agredieron a los trabajadores que pedían cuenta de los actos a la dirigencia local. Por ello, el secretario gremial, Carlos De León, tuvo que salir a pedir perdón públicamente.
Los periodistas abordan la información de manera diferente y siempre subjetiva. En la observación de los hechos al momento de comunicar, para muchos, cuentan los principios ideológicos y éticos, no cuentan los intereses privados o los beneficios económicos. Llevar una información veraz no resulta fácil en un pueblo cuyos valores se han degradado o lo que es peor se han naturalizado.
La cúpula del Sindicato de Trabajadores Municipales de Pinamar pisa suelo fangoso y no porque los periodistas narren sus andanzas procaces sino porque sus propios afiliados lo manifiestan por doquier y los hechos aunque se quieran tapar salen a la luz indefectiblemente.